Tras una formación con el gran maestro Enrique Aguilar me quedé dando vueltas a esta frase… Eliminar la presión del resultado…
En la vida, la gente, las circunstancias, nosotros mismos… nos ponemos delante una serie de objetivos, metas… y cada unx de ellxs conlleva tareas y estas una acción orientada a su resolución. Si pensáramos en la acción, como acto creativo, experimental, vivencial… y no le diéramos el mayor peso al resultado, seguramente resultaría mucho más estimulante. Sería bonito no forzarlo, alcanzarlo mediante la acción, de un modo auténtico y coherente, ya que el resultado se crea por sí mismo (si todo lo anterior se ha cumplido correctamente) tal y como explicaba Stanislavski en “El trabajo del actor sobre sí mismo en el proceso creador de la vivencia”.
Interesante y podría decir que preciso, estar entusiasmado con la tarea; enfocarte en tareas vivas, auténticas, activas, humanas… que te impulsen hacia delante. Eliminar esa presión del resultado, y concentrarnos en vivir la experiencia con alegría, siendo honestos con nosotros mismos, escuchando realmente lo que nos pasa en ese preciso instante, y conectar con nuestra parte instintiva... quizás así logremos deshacernos de esa presión que no nos lleva a ningún camino.
En LudicLab apostamos por trabajar las tareas a través del juego, ya que hace que conectemos con nuestro lado instintivo, nuestro lado más lúdico y nos lleva a un claro reequilibrio. Placer y Consciencia.
El juego no es patrimonio del ser humano, el juego pertenece a la vida y a un propósito superior. Enrique Aguilar
